viernes, 24 de septiembre de 2010

Dogging en pineda

En las afueras de BCN existe una buena pineda donde se suela practicar Dogging. A veces voy e intento introducirme en algún encuentro o folleteo con parejas y varios chicos.

En esta ocasión había quedado de antemano con una pareja para follarnos a la chica su novio y 4 ó 5 tíos más en éste lugar. Llegué el primero y esperé. Luego llegó la pareja y estuvimos charlando mientras ella fumaba inquieta. Llegaron dos hombres más y empezamos la juerga.

Empezamos sacándonos las pollas y ofreciendolas a la chica para que nos la chupara. Ella vestida y sentada en un asiento del coche. Empezó con una y poco a poco tenía cuatro pollas entre sus manos y boca. Algunas de dos en dos mientras pajeaba con cada mano dos más. Me chupó la polla y luego los huevos y al final sobre el capó empezamos a montarla a turnos. El novio puso una manta muy grande en el suelo y nos tumbamos todos donde empezamos a follarla todos a la vez, usando sus tres agujeros entre cuatro hombres, en otras ocasiones entre tres mientras su novio miraba y se hacía pajas.

Al final nos corrimos en plan bukake, todos en su cara, corriendo su maquillaje de forma excitante, de forma que nos entró ganas de follarla de nuevo. La chica al acbar la orgía sacó toallitas húmedas y se limpió entera, ya que estaba bien llena de semen.

Una foto del encuentro (antes de la follada):


Nuria, la novia de Jose

Nuria es la novia de un compañero con el que salgo en bici los fines de semana. Salimos varios compañeros y hacemos unos kilómetros para después tomar alguna cerveza antes de ir a comer.

Un domingo por la mañana a las 7:00 Am qedé con mi amigo Jose para dar la vuelta de rigor que solemos hacer de vez en cuando con las bicis. el resto de compañeros tenían recados y mucho sueño por lo que ambos fuimos solos. Empezamos por un camino de tierra que desemboca a una pequeña montañeta que solemos subir para luego bajar a gran velocidad. Una hora después nos metimos en la carretera nacional para acercarnos a una zona boscosa donde también solemos acudir para hacer un poco el burro. Mientras corríamos con las bicis por la Nacional, vimos una prostituta en un arcén que nos inquirió sendos ofrecimientos sexuales.

descartamos la solicitud de la puta y seguimos con las bicis. al poco empezamos a comentar que la puta estaba muy buena y menudas tetas gastaba. Además iba con el culo al aire, enseñando nalga y a los dos nos puso burrote.

tras estos comentarios mi amigo Jose me comentó que su novia, Nuria también tiene las tetas de vicio y que su culo es mucho más bonito que el de la puta. Hablando de esta manera y tras unos km de morbo sobre su novia, le dije que estaba super cachondo y me apetecía follarme a alguna mujer. Jose me dijo que también le apetecía. empeazmos a barajar la opción de follarnos a la puta, pero Jose me propuso otra cosa ir a su casa, donde Nuria, su novia estaría aún durmiendo y follárnosla los dos ya que ella había comentado alguna vez a Jose que le apetecería hacerselo con dos tíos.

Corrimos hasta su casa en bici y en poco más de una hora llegamos, subimos las bicis entramos en su casa los dos sudados y nos dirigimos al dormitorio, donde Nuria estaba durmiendo. Ambos nos desmudamos y nos metimos silencionsamente en la cama, la tocamos, la sobamos hasta que ella se sobresaltó y pegó un chillido que nos asustó. El susto se le pasó rápidamente al ver nos nabos tiesos y palpitantes deseando montarla.

así empezamos, tocamiento, le quitamos el pijama, le sacamos las tetas fuera y empezamos a chuparla, de pies a cabeza, lentamente. Yo metí mi polla entre sus pies y me la froté un rato con ellos, su novio le metió la polal en la boca y ahí empezó la follada como tal.

tras uan mamada lenta y salibando mucho metí mi polla en su boca para que hiciese lo mismo con mi rabo. Su novio ya la estaba penetrando cuando empecé a gozar de su felación y del tacto de sus ubres.

seguimos follandola a dos bandas, por el culo, por la boca y por el coño, dándole mucha caña. Mi amigo se corrió en su cara y yo poco después en su pecho. Ella empezó a coger nuestra lefa y a chuparla lentamente mientras nos invitaba a meter nuestras pollas en su boca para limpiarnoslas.

acabamos los trs en la ducha donde hicimos una doble penetración. yo la cogí en brazos y la penetré vaginalmente y me apoyé en la pared con ella en brazos para que luego su novio la penetrada analmente contra la pared.

Una foto, poco antes de montarla:


jueves, 16 de septiembre de 2010

Maria la infiel

Uno de los encuentros que recuerdo con más cariño fue hace un par de años, cuando contacté con un matrimonio de Sabadell, Maria y Alberto, ella morbosa señora y él cornudo, cornudo, cornudo. Su fantasía era fácil, simplemente buscaban un chico para que hiciera oral con ella pero sin que él estuviese presente, a la vez con cierta seguridad para ella y con la opción de que el cornudo posteriormente pudiese gozar de los momentos que su esposa había disfrutado. Les propuse quedar con ella en un centro comercial, que ella llevase en el bolso una videocámara y que me siguiese en el juego.

Así fue, quedé con ella, en un centro comercial a una hora en concreto con poca afluencia de público, le indiqué que me siguiese a cierta distancia con una prenda de ropa en la mano. Yo tomé otra y me metí en el probador, ella hizo lo mismo. Una vez en el pasillo del probador,ambos nos metimos en el mismo probador. Le indiqué a ella que me dejase la cámara, la encendí y empecé a grabar.

Mientras hacía la grabación le dije que se desnudase ante la cámara, luego que se arrodillase y me sacase la polla de la cremallera, me la chupó lentamente en plan pareja, salivando mucho. Me bajé los pantalones y como pude filmé un beso negro que le pedí me hiciese. Luego para acabar la agarré bien de la cabeza y le forniqué la boca, mientras le agarraba los pechos. Así llegó el momento en que me corrí en su boca. Mi semen cayó por sus pechos. Siguió lamiendo hasta dejarme limpio, luego ella se limpió con unos pañuelos de papel, mientras yo seguia filmando su cuerpo desnudo, sudado y complacido. Se subió los pantalones, se puso la blusa y le di la cámara. Salió con la prenda sin probar como una señora, en pocos segundos salí yo satisfecho.

jueves, 2 de septiembre de 2010

Olga y Jose

Primer contacto 

Olga y Jose Manuel son una pareja de 49 y 51 años de la provincia de Barcelona. Son una pareja bastante morbosa y llena fantasías. Me enviaron una carta expresando sus inquietudes sexuales a mediados de Noviembre del 2002. Me contaban que son un matrimonio maduro donde él es sumiso y ella es Ama, pero que siempre practicaban sus fantasías dentro de la pareja.


Sus fantasías íntimas 

La fantasía de ellos era incluir en sus relaciones S/M algún chico para satisfacerla a ella que fuera sumiso, muy respetuoso y que siempre llamara a Olga como Mi Señora.

Consumiendo el contacto 

Hablamos por email dos veces y quedamos en la estación de tren del pueblo donde vivían. Nos encontramos los tres allí en la estación y fuimos de inmediato a su torre en una pequeña urbanización cercana. En el coche ella empoezó a demostrar sus dotes de dominación llamando a su marido como perro o imbecil y a mi como cerdo y perro. Al llegar a casa entramos y el marido se orrodilló ante ella. Yo me quedé un poco parado pero ella enseguida me hizo entender mis obligaciones. Me cogió de una oreja y me hizo arrodillar también. ahí empezó el juego, nos hozo desnudar y empezó a jugar con los dos después de haber ido a cambiarse y haberse puesto una indumentaria más apropiada (Lencería y zapatos de tacón y una vara de madera fina). Nos golpeó en alguna ocasión y nos obligó a hacerle prácticas de sumisión. Le lamimos los pies y yo tuve la oportunidad de lamerle el coño también.. Ató a su marido y me usó a mi como un caballo. Se meó encima mio mientras estaba haciendome esa práctica equina. Yo en todo momento disfruté de sus actos y me encantó servir a una Ama tan hermosa a pesar de su edad. Estaba magnifica y tenía muy buen cuerpo (algunos kilos de más pero muy bien ella). Me obligó a hacerle el beso negro mientras su marido le lamía a ella nuevamente los pies; Le lamí el ano como ella me indicaba incluyendo meterle mi legua dentro del ano. Nos ató posteriormente a los dos en la cama y nos echó cera caliente en los genitales (no quemaba demasiado, se puede soportar bastante bien). Estuvimos más de dos horas de prácticas similares cuando ella se acercó y empezó a mamarme la polla, me quedé gratamente sorprendido y al parecer su marido también. Transcurridos unos 10 minutos ella le indicó a su esclavo que me pusiera un condón. él lo hizo y luego me indicó ella que penetrara analmente a su marido. así lo hice, empecé a penetrarle (tenía el ano bastante dilatado, después me enteré que ella le penetraba con masturbadores). Al cabo de pocos minutos ella indicó que su marido la follara a ella mientras yo enculaba a su marido los tres a la vez. Así estuvimos unos 15 minutos hasta que ella dijo de atar a su marido a los pies de la cama y ella se abrió de piernas en la cama. Me dijo que me la follara mientras su marido nos lamia los pies a los dos. Ella había tenido un orgasmo anteriormete cuando estabamos los tres follando y al follarmela yo me corrí muy a gusto, la verdad. después acabamos hablando en la cama, desnudos mientras el marido nos servía café y pastas vestido de chacha.


Susana, mujer casada

Hace algún tiempo Susana, la esposa de unos vecinos que vivían en mi escalera me empezó a enviar ciertas ondas sexuales en el ascensor.

Siempre se presentaba muy atenta conmigo, muy simpática y ciertamente agradable cuando podíamos charlar en la escalera o el ascensor. En una ocasión en el ascensor me miró de una manera poco habitual para ella y para una mujer casada. No hice caso a esas señales, pero a medida que avanzavan las semanas y coincidíamos en algún lugar, si ambos nos encontrábamos a solas se tocaba el pelo o ponía las manos en su cadera de una forma, digamos... deliciosa.

tras estas señales preliminares, un día la encontré a dos calles de casa con tres bolsas de compra. cortesmente intenté ayudarla y cedió a darme un par de bolsas. La acompañé hasta el portal y le dije de subir la compra a casa, ya que estaban haciendo la inspección del ascensor de ese año y no se podía utilizar.

ella subió por las escaleras y yo la seguí. Una falda que le llegaba a media rodilla y según pude observar, contorneando las caderas a cada paso. Cuarto piso y llegando, ella empezó a sacar las llaves a media escalera y se le cayeron, aún no sé si por descuido o a propósito, ella se agachó y la falda no le permitía hacerlo de forma cómoda, así que se la arremangó un poco hasta dejar medios muslos fuera. recogió las llaves y abrió la puerta.

En casa ella cerró la puerta y me llevó a la cocina, hablando de que la distribución del piso es diferente al mío. Dejé las bolsas y ella se empeñó en enseñarme las habitaciones y la distribución de su piso. Al llegar a su habitación me la enseñó, y se quedó de pie callada mirándome fíjamente durante unos 4 ó 5 segundos que se me antojaron eternos. Luego me dijo acariciandose el vientre:

- Ahora tienes la oportunidad. - Se quedó callada de nuevo y en pocos segundos me di cuenta de que quería guerra.

Procedí a cercarme lentamente y al ver que ella no se movía de posición, empecé a tocarle el brazo y seguidamente me acerqué a su boca. La besé apasionádamente y ella me acompañó con sus brazos alrededor de mi cuerpo. La estiré en su cama de matrimonio.

Le subí la falda hasta la cintura, la besé, magreé, toqué y seguidamente me encontré acurrucado entre sus piernas oliendo su sexo, separando su braga blanca y metiendo mi lengua hasta el fondo.

sus tetas quedaron libres al sacárselas del sujetador. Me desnudé, se desnudó y empezamos a follar tras ponerme un condón que ella sacó de la mesita de los calzoncillos de su marido.

Acabamos un polvo y empezamos otro, que iniciamos en una silla ante el espejo de su habitación, donde mirábamos nuestras caras de placer. Le pedí hacernos una foto de forma discreta en esa posición y ella accedió:




Desde que me cambié de piso hemos follado una docena de veces más, pero ahora es más difícil ya que vivimos en poblaciones diferentes. espero que algún vecino generoso se la beneficie como lo hice yo, en su propia cama de mujer casada.